Muchos automóviles vienen equipados con motor de otra marca, ya sea por un acuerdo de colaboración, por ahorrar tiempo y dinero en desarrollar un nuevo motor si es más rentable comprar uno a la competencia o porque un fabricante adquiere a otro y aprovecha sus productos. Conozca algunos ejemplos.
Alfa Romeo Stelvio Quadrifoglio > motor Ferrari
Ferrari dejó de ser parte de FCA, hoy Stellantis, sin embargo, esto no fue impedimento para que la marca de los deportivos cediera un potente motor al SUV de Alfa Romeo.
Aston Martin DB11 > motor Mercedes-AMG
La marca británica preferida por James Bond firmó un acuerdo con la alemana Mercedes-Benz para equipar a su DB11 con un V8 biturbo de 4,0 litros y 510 HP, desarrollado por la filial deportiva de Mercedes-Benz, AMG, y reservar el famoso V12 de Aston Martin para otros modelos.
Citroën SM > motor Maserati
El modelo francés de 1970, además de incluir varias tecnologías que se adelantaron a su época, sorprendió a muchos equipando un motor V6 de 2,7 litros Maserati. El motivo: la marca del tridente perteneció a Citroën desde 1968 hasta 1975.
Dodge Avenger > motor Volkswagen
El fabricante norteamericano decidió utilizar un motor local, con gran aceptación en ese mercado, para ingresar a Europa. Así se inclinó por usar el motor turbodiésel de la alemana Volkswagen. Finalmente, el modelo no tuvo el éxito esperado.
Ford Focus ST > motor Volvo
Ford adquirió Volvo en 1999 y por ese motivo decidió usar el motor 2,5 litros de 5 cilindros en línea que equipaba el modelo T5, para montarlo en su hatchback de altas prestaciones ST. Después de unos años, la marca sueca fue adquirida por Geely.
Land Rover Defender > motor BMW
Cuando Land Rover perteneció al Grupo BMW, entre 1997 y 2001, equipó a su todoterreno Defender con el motor de gasolina de 6 cilindros en línea de la marca alemana.
Lexus LFA > motor Yamaha
Yamaha, conocida por sus motos, sus instrumentos musicales y sus motores para embarcaciones, desarrollo el poderoso V10 de 4,8 litros que Lexus usó para su superdeportivo y también se encargó de diseñar el sistema de escape que le dio un sonido especial.
Lotus Exige > motor Toyota
El deportivo inglés es movido por el mismo motor que utiliza el sedán Toyota Camry, un V6 de 3,5 litros fabricado por la marca japonesa, mientras que el Lotus Evora equipaba el mismo motor, pero sobrealimentado, para más potencia.
Maserati Quattroporte > motor Chrysler
La marca italiana, conocida por sus poderosos modelos, recurrió a un motor V6 de 3,0 litros fabricado por la americana Chrysler, que cruzaba el océano para recibir sus últimos retoques de fabricación por ingenieros de Ferrari.
McLaren F1 > motor BMW
La marca británica McLaren había invertido tanto tiempo y esfuerzo diseñando su superdeportivo F1 que evitó complicarse más desarrollando un motor para el modelo. Así, decidió emplear el V12 de 6,1 litros con 633 HP de BMW que alcanzaba los 386 km/h y acelerara de 0 a 100 en 3,2 segundos.
McLaren MP4-12C > motor Nissan
McLaren compró los derechos de uso del motor Nissan VRH35L, un V8 biturbo de 3,5 litros desarrollado para los carros de competencia de la marca japonesa que participaron en el campeonato de resistencia de Le Mans en 1989 y para el prototipo R390. Le hicieron unas modificaciones y lo colocaron en el MP4-12C. Este motor fue el punto de partida de los poderosos propulsores que hoy desarrolla McLaren.
Mercedes-Benz Clase A > motor Renault
La cuarta generación del Clase A de Mercedes-Benz, de 2018, usó un motor turbodiésel de 1,5 litros y 115 HP de la marca francesa, para honrar los varios acuerdos comerciales entre Daimler y la alianza Renault-Nissan-Mitsubishi, de la cual nació la pick-up X-Class Mercedes-Benz, fabricada sobre la base de la Frontier de Nissan.
Mitsubishi Galant > motor AMG
A finales de los 80, el fabricante japonés acudió al preparador alemán, antes de que se fusione definitivamente con Mercedes-Benz, para solicitarle el desarrollo de un motor de alta performance. El resultado final fue el 4G63, un 4 cilindros, 2,0 litros con 170 HP.
Noble M600 > motor Volvo/Yamaha
El superdeportivo Noble M600 presentado en 2010 usaba un motor Volvo V8 biturbo de 4,4 litros, el mismo que usaba el S80 y el XC90 del fabricante sueco, pero que Yamaha potenció y lo llevó a entregar 650 HP.
Porsche 914 > motor Volkswagen
Mientras unas marcas recurrían a sus rivales en busca de motores potentes, Porsche utilizó un motor Volkswagen pequeño y económico para equipar al prototipo desarrollado por ambas marcas en los 70. La idea era lanzar un modelo asequible para todos los públicos y el 4 cilindros de Volkswagen, con apenas 80 HP, era ideal para el proyecto.
SEAT Ibiza > motor Porsche
En 1984, antes que SEAT pase a ser parte del grupo Volkswagen y cuando su relación con Fiat estaba llegando a su fin, llegó el compacto Ibiza de mucho éxito en ventas, diseñado por Italdesign, con carrocería desarrollada por Karmann y motores Porsche de 1,2 y 1,5 litros, con 62 HP y 90 HP respectivamente.
Toyota 2000GT > motor Yamaha
Yamaha tenía entre sus planes colaborar con Nissan para dar vida al sucesor del Fairlady, pero Nissan decidió desarrollar el proyecto solo. Situación que aprovechó Toyota para pedirle que desarrolle el motor de su 2000GT, además de colaborar con el diseño.