La región de Aysén, una de las más remotas de Chile, enfrenta retos únicos debido a su vasto territorio y baja densidad poblacional. Con una extensión de 108.494 kilómetros cuadrados y solo 108.538 habitantes, la región carece de accesos terrestres en varias zonas, lo que la hace prácticamente inaccesible para muchos. Sin embargo, esta singularidad también presenta una oportunidad para aplicar tecnologías innovadoras que permitan monitorear y gestionar de manera eficiente sus recursos naturales. Un claro ejemplo de este tipo de iniciativas es el Proyecto Comunidad, liderado por la Universidad de Aysén y la Fundación para la Innovación Agraria (FIA), con la colaboración de un equipo multinacional. Este proyecto tiene como objetivo implementar pilotos que proporcionarán acceso a megadatos sobre incendios forestales, la agricultura y los Campos de Hielo Norte de la región, contribuyendo a una gestión más eficiente y sostenible del territorio.
Contexto del Proyecto Comunidad: Un Enfoque Internacional
El Proyecto Comunidad es financiado por la Unión Europea y busca crear una red de partes interesadas que aprovechen los datos proporcionados por los satélites de Copernicus. Esta red se centrará en la agricultura, la silvicultura y el desarrollo rural, buscando desarrollar colaborativamente algoritmos, servicios y productos adaptados a las necesidades locales de los usuarios. El nombre “Comunidad” refleja precisamente la intención de construir un espacio colaborativo para generar soluciones que beneficien a la población local. Además, este proyecto tiene el potencial de transferir el conocimiento adquirido a otros países que enfrenten problemas similares en sus territorios rurales y agrícolas.
La Importancia de los Datos Satelitales en Aysén
Uno de los grandes beneficios del Proyecto Comunidad es la implementación de una plataforma que permite el acceso a información en tiempo real proveniente de los satélites Copernicus y de la red de satélites de la Unión Europea. Estos satélites proporcionarán datos cruciales sobre la situación de los incendios forestales, el uso del suelo, la agricultura y el monitoreo de los Campos de Hielo Norte. Este tipo de información, que anteriormente era difícil de obtener debido a las características geográficas de la región, ahora será accesible a través de una página web y una aplicación móvil, que facilitarán la toma de decisiones para los agricultores, autoridades locales y otros actores clave.
El uso de megadatos permitirá a los usuarios finales, como los agricultores, visualizar capas de información sobre posibles heladas, lluvias extremas, incendios forestales y otros fenómenos climáticos que podrían afectar su actividad productiva. Según Johnny Valencia, Investigador y Líder de los Pilotos Comunidad, esta plataforma ayudará a los usuarios a tomar decisiones más informadas y a actuar de manera preventiva frente a estos riesgos, mejorando la resiliencia del sector agrícola de la región.
Desarrollo de Pilotos para la Agricultura Sostenible
El proyecto se estructura en torno a tres pilotos específicos que buscan evaluar y optimizar la gestión de recursos naturales y agrícolas en la región. El primero de estos pilotos se concentra en los Campos de Hielo Norte, un área de gran importancia para la región debido a su impacto en la disponibilidad de agua y su relevancia para el turismo. En este piloto, se evaluará la cobertura de nieve a lo largo del tiempo, utilizando algoritmos diseñados para estimar en tiempo real la cantidad de nieve presente en la zona. Estos datos serán clave para planificar la disponibilidad de agua durante el verano, un recurso esencial tanto para el sector agrícola como para el consumo humano.
El segundo piloto se enfoca en la agricultura y la gestión de áreas protegidas. A través del análisis de variables agroclimáticas y el uso de sensores remotos, se podrán gestionar mejor los suelos y planificar los cultivos adecuados para la región de Aysén, considerando sus características geográficas y climáticas. Este piloto también se centra en el uso sostenible del suelo y la protección de áreas naturales, un aspecto fundamental para preservar la biodiversidad y garantizar la sostenibilidad de las actividades productivas.
El tercer piloto tiene un enfoque en la prevención y gestión de incendios forestales. La región de Aysén ha sido víctima de incendios forestales en los últimos años, lo que ha afectado tanto al medio ambiente como a las comunidades locales. Este piloto utilizará datos satelitales para monitorear las zonas de riesgo antes, durante y después de los incendios, proporcionando información clave para los organismos de emergencia y facilitando la toma de decisiones en tiempo real.
Impacto de la Cooperación Internacional
La cooperación internacional ha sido un factor clave en el desarrollo de este proyecto. A través de la colaboración con Chequia, que aporta su experiencia en el uso de sensores remotos y el análisis basado en inteligencia artificial (IA), el Proyecto Comunidad tiene el potencial de transformar la gestión ambiental y agrícola en la región de Aysén. La delegación checa, encabezada por el embajador Pavel Bechny, ha destacado la importancia de este tipo de iniciativas para fortalecer las relaciones bilaterales entre Chile y Chequia, especialmente en áreas de innovación tecnológica aplicadas al sector agropecuario.
El embajador Bechny señaló que la riqueza de Chile radica en sus diversas regiones y climas, y que este tipo de cooperación tiene el potencial de beneficiar tanto a Chile como a Chequia, creando un puente entre el sur de Chile y Europa. La visita de la delegación checa a la región también es una oportunidad para celebrar los 100 años de relaciones diplomáticas entre ambos países, destacando el valor de la colaboración en áreas como la innovación tecnológica, la gestión forestal y la resiliencia agrícola.
Retos y Oportunidades para el Futuro
Aunque el Proyecto Comunidad ya ha avanzado significativamente en el desarrollo de los pilotos, aún queda trabajo por hacer. Según Johnny Valencia, el proyecto tiene una duración de dos años y, aunque se ha avanzado mucho en la recopilación de datos y el diseño de los algoritmos, el próximo año se lanzará la plataforma en su versión completa. A partir de entonces, se evaluará cómo los usuarios locales adoptan y utilizan la información proporcionada, lo que determinará la continuidad del proyecto y su posible expansión.
La información generada por el Proyecto Comunidad tiene el potencial de transformar la forma en que se gestionan los recursos naturales y agrícolas en la región de Aysén. No solo se mejorará la eficiencia en la toma de decisiones, sino que también se brindará una mayor capacidad de respuesta ante situaciones de emergencia, como incendios forestales y fenómenos climáticos extremos. Además, el uso de tecnologías avanzadas permitirá a los agricultores y autoridades locales adaptar sus prácticas a los cambios climáticos y mejorar la resiliencia de la región ante los retos del futuro.
En conclusión, el Proyecto Comunidad es una muestra clara de cómo la colaboración internacional y el uso de tecnologías avanzadas pueden generar soluciones innovadoras para problemas complejos, como la gestión de recursos naturales, la agricultura sostenible y la prevención de desastres naturales. Con el apoyo de datos satelitales y plataformas digitales, Aysén podrá avanzar hacia un futuro más sostenible, resiliente y conectado.