Compartimos algunos consejos para alargar la vida útil de las llantas, uno de los elementos más importantes del vehículo, por ser esenciales en la seguridad, el movimiento, la dirección, el frenado, la adherencia en las curvas y por ser el único punto de contacto entre el carro y el camino.
Además del desgaste natural por el contacto con el asfalto, otros factores determinan la duración de las llantas:
- Forma en la que manejamos
- Estado mecánico del vehículo, principalmente de la suspensión y dirección
- Calidad de fabricación del neumático
- Características de vehículo (peso, tracción, potencia del motor, etc.)
- Carga que transportamos
- Condiciones de las pistas
- Clima y temperatura de la pista
Sobre algunos factores no tenemos mucho que hacer, más que esquivar huecos y baches además de evitar largos viajes cuando la pista está demasiado caliente. A cerca de otros factores, sí depende de nosotros hacer que las llantas duren más y sean más seguras:
Maneje de una manera prudente. Evite el manejo agresivo y deportivo en la ciudad. Acelerar violentamente, hasta hacer patinar las llantas sobre el asfalto, frenar continuamente de manera brusca y tomar las curvas a alta velocidad no solo desgastará los neumáticos, sino pone en riesgo a pasajeros y peatones, además de dañar otras piezas del carro y aumentar el consumo de combustible.
Verifique una vez por semana y antes de iniciar un viaje largo que la presión de inflado de las llantas sea la correcta, la que está indicada en el manual del carro. La medición debe hacerse con los neumáticos fríos y de preferencia por la mañana. La presión de inflado afecta la seguridad y el consumo de combustible.
Esquive los huecos de las pistas y disminuya la velocidad cuando pase sobre rompe-muelles. Además de desgastarse las llantas, afectará la suspensión y desajustará la carrocería.
Por lo menos cada 15 días revise que las llantas no presenten desgaste en la banda de rodamiento (la superficie que entra en contacto con la pista) y que las paredes laterales no tengan golpes, cortes o globos. Podría acelerarse el desgaste y hasta provocar un accidente si se revienta en pleno movimiento.
Realice la rotación de las llantas cada 10000 kilómetros. Intercambie la posición de los neumáticos para que el desgaste sea más lento o que este sea uniforme.
Al primer indicio de que la dirección del carro “jale” hacia un lado o el timón empiece a vibrar, lleve su carro a un especialista en llantas. Es casi seguro que necesite balanceo y alineamiento de las llantas.
Evite golpear los sardineles al estacionarse o al dar las curvas muy pegado a las veredas, se puede cortar el neumático o dañarse por dentro, además de que las llantas pueden desalinearse y gastarse más rápido al rodar.